Tales como: fracturas y heridas de la cara, secuelas de fracturas y lesiones en la cara, tumores benignos y malignos de la piel, cavidad bucal y orofaringe, cirugía oral (incluyendo dientes, quistes, etc.), trastornos de la articulación temporomandibular, enfermedades de las glándulas salivares, cirugía reconstructiva y estética de la cara y malformaciones congénitas (labio leporino, fisura palatina, orejas en asa, etc.).