Después del verano o de algunos días de vacaciones donde disfrutamos de algún otro Tiberio, y un descanso más largo, es cuando venden el remordimiento por las libras extra que ganamos.
Muchos de nosotros pasamos poco tiempo en la comida diaria y preferimos hacer las cosas rápido, sin esfuerzo y con resultados inmediatos. Es cuando decidimos hacer una "dieta milagrosa", es decir, perder el mayor peso posible con el mínimo tiempo y esfuerzo posible, y sin que esto afecte de ninguna manera a nuestra salud. Pero... sabemos que los milagros no existen. Las "dietas milagrosas", a menudo difundidas por los medios de comunicación o revistas de moda, se caracterizan por las pocas calorías que aportan y pueden llevar a: carencias de vitaminas y minerales, alteraciones en el metabolismo, incluso en un monotono, lo que hace difícil de seguir en el tiempo. Puede ser peligroso para la salud.
En esta situación el ayuno, el cuerpo puede reaccionar, compensando la falta de energía recibida a través de los alimentos, con una destrucción de las proteínas del cuerpo como fuente alternativa de energía, lo que causa una pérdida de masa muscular: Esto puede interpretarse erróneamente como el éxito del régimen elegido desde que la escalada en la balanza vio pérdidas dramáticas de peso, pero no ha perdido tejido graso, sino tejido muscular que es muy rico en agua, que eliminó mucho líquido en la primera fase el seguimiento de la dieta.
Un problema añadido de estas "dietas milagrosas" es que favorecen una recuperación muy rápida de peso perdido (efecto "Bounce" o "yo-yo"). La tendencia en la recuperación del peso ocurre porque las situaciones de los mecanismos nerviosos y hormonales rápidos de gran alcance se comienzan que se oponen a la pérdida de peso: mayor ahorro de energía y aumento del apetito. Estos mecanismos conducen a una recuperación rápida del peso perdido cuando vuelve a la manera generalmente, incluso en algunos casos puede aparecer picoteig importantemente, ansiedad exagerada de comer, y un cierto desorden de consumición del binge. Ejemplos claros de este tipo de dietas son la dieta de Atkins o la dieta del Dr. Montignac, la dieta Dukan o simplemente la dieta de la fruta (2 días enteros comiendo fruta), y una larga lista de nombres.
En Resumen, las "dietas milagrosas", aunque la disminución del peso en el corto plazo, constituyen un riesgo para la salud porque pueden:
1. causar deficiencias de proteínas, vitaminas y minerales por la falta de consumo con los alimentos.
2. efectos psicológicos negativos.
3. promueva el efecto "despedida" o "yo-yo".
4. abandonar estas dietas, las personas que todavía no han aprendido a comer sanamente y volver a los hábitos anteriores.
La mejor manera de perder peso, es hacer lo correcto, sin prisa, ser constante y re-educar nuestros hábitos para aprender a comer más sano y equilibrado y realizar la actividad física con regularidad.
Para más información, por favor consulte la Página Web de laAgencia Española de seguridad alimentaria y nutrición
http://www.AESAN.msc.es/AESA/web/AesaPageServer?idpage=89&idcontent=7239